OLVIDO

Hoy, no quiero prolongarme, no quiero usar palabras pensadas, sólo quiero ir diciendo lo que dice el corazón y no la cabeza o el alma, hoy simplemente quiero hablar de un tema que pasa muy a menudo: El olvido.

Antes que nada... Siempre he tratado de definir al olvido, pero nunca lo he logrado, he oido demasiadas cosas respecto al olvido, y no acabo por entender lo que esto significa, ¿Tal vez el olvido es una situación por la que pasamos todos? ¿Estamos seguros que el olvido es tratar de dejar en el pasado algo de nosotros, algo de alguien más, una etapa, un aprendizaje, etc.?.

Plagiando un poco una presentación de Abel Velásquez (Para quienes no lo conocen, es un cantautor de trova Oaxaqueño, radicado en Toluca y Pachuca principalmente, murió hace poco de un infarto, y para mi es el TROVADOR más grande de la historia, y en general de mis 3 favoritos en todos los géneros musicales), específicamente en una canción que se llama Olvídame, en el CD y DVD de Aguanta Corazón, encontré algo que me llamó mucho la atención respecto a este tema: "Decía yo de unas frase de Mario Benedetti que me dejó muy marcado y es: "el olvido está lleno de memoria" yo no se como interpretarla, porque alguien alguna vez me pidió, me exigió y me suplicó que la olvidara, y bien a bien no se si lo hizo para... para decirme en realidad que la recordara siempre... cualquiera que haya sido su objetivo, el primero no funcionó y el segundo, y el segundo todavía duele".

Esta vez no quiero hablar de historias, simplemente quiero dejar claro que el Olvido he descubierto que va mucho más allá de tratar de dejar atrás una parte de la historia, una persona, una situación, siempre será imposible, y que mientras más lo intentes, más difícil será, porque es cuando con más fuerza atacan los recuerdos... alguna vez escuché que las 2 y 3 de la mañana son las peores horas para andar despierto, porque es cuando atacan los recuerdos y la cosa se puede poner fea y creo que muchos lo han o lo hemos descubierto, es peligroso andar despierto a esas horas del día, o mejor dicho de la madrugada... Para terminar, quiero dejarles aquella canción de Abel Velásquez, dónde en otro concierto llamado Viva la casta nos deja una parte de su alma, y como mi blog busca ser eso, un reflejo del alma... tanto mía, como de aquellos que por una u otra razón no pueden expresar lo que pasa en ella, y pues este Trovador es muy desconocido para algunos, pero para aquellos que conocemos todas sus canciones, siempre será un gran compañero de tristezas y felicidades y espero les guste lo que este GRAN CANTAUTOR pensaba:

"Voy a cantar una canción que tiene especial significado porque a pesar de que muchas veces se me ha acusado de escribir desde el punto de vista femenino, lo cual yo agradezco infinitamente, NUNCA ME IMAGINÉ QUE LAS MUJERES FUERAN CAPACES DE UNA CRUELDAD SIN LÍMITES, y en toda mi vida jamás esperé escuchar que alguien me pidiera de la manera más atenta y más fría que la olvidara. Yo como todavía tengo el ligero pecado de ser hombre, me tomé la libertad de hacer una canción como si fuera yo quién le pide a esa persona que me olvide y dentro de esa canción, traté de explicar los motivos, lo único que me quedó claro es que tal y como dice Mario Benedetti: "El olvido está lleno de memoria""

No dejes que mi voz te toque el corazón,
no escuches mis sollozos a la luna,
no contestes cuando aulle,
ni me esperes en la bruma
de tu madrugada casi siempre oscura.

Olvídame, y vuelveme la espalda.
Olvídame, descubre mi mortaja,
no dejes que el adiós se anude en tu interior
haciendo del dolor una corbata.

No tengas compasión,
y no la tendré yo,
para que a la luz del tiempo
me trague mis palabras.

Olvídame, y vuélveme la espalda.
Olvídame, descubre mi mortaja.
Olvída que el olvido tiene cosas de los dos.

Olvídame, que no sepa mi mirada
que vivste en el ayer,
que no duela en mi garganta
contar que una vez tu piel
puso marcas en la mía
como prueba de su historia.

Olvídame, que el ocaso no te lleve
hasta mi desnudez, que no quede
ni un recuerdo con el alma en pie,
que el olvido no se llene de memorias.

Olvídame, y vuélveme la espalda.
Olvídame, descubre mi mortaja.
Olvida que el olvido tiene cosas de los dos.

Olvídame, que no sepa mi mirada
que vivste en el ayer,
que no duela en mi garganta
contar que una vez tu piel
puso marcas en la mía
como prueba de su historia.

Olvídame, que el ocaso no te lleve
hasta mi desnudez, que no quede
ni un recuerdo con el alma en pie,
que el olvido no se llene de memorias.

Olvídame, porque no puedo buscarte
y volver a perder, porque una palabra tuya
y no habrá más que hacer, porque miento
mucho peor de lo que piensas,
y porque contra mis fuerzas te olvidé.
Olvídame...